El día de hoy, me escape de esa cárcel, que se llama trabajo, y me dirigí a una panadería a comprarme algo para desayunar, cuando ante mis ojos fui testigo de la necesidad del ser humano. Estaba adelante en la fila un señor, con su hijo comprando el desayuno de ambos y lo único que les alcanzo fue un bollito de pan y dos frescoleches, fue impactante saber que realmente este señor solo eso tenía para gastar. - Puede ser que ya desayunaron, y el niño es un malcriado y le compro eso solo para que se callara.
- Una merienda antes de desayunar en la casa.
- Era el único efectivo que tenía, debido a que el lugar no acepta la Visa Oro que tiene.
- El señor es un reverendo borracho, y prefiero gastar el dinero en guaro que en su retoño.
- O el señor simplemente tiene uno de esos tantos trabajos de mensajero motorizado, ganando el salario mínimo mas horas extras, y maneja un presupuesto muy limitado para poder sobrevivir a la crisis del país actual
Dando el beneficio de la duda me inclino por este último escenario, lo que me lleva a pensar el desperdicio que muchas veces hacemos los seudoclase media, el cual me incluyo.
El montón de dinero que se gasta en comida rápida, cuando muchas veces esa comida ya no sabe como antes, o sabe feo, ya KFC es como comer masa con sal, y Taco Bell es puro frijol de cartago con natilla, (lo peor es comer en Taco Bell San Pedro después de la 1am, mejor morirse de hambre, y la vieja que atiende... Bueno ese es otro tema)
Gastar en ropa exhuberante, pero exhuberantemente cara, eso debería ser ilegal, al fin y al cabo es la misma tela.
Gastar en accesorios electrónicos, que es obligación tener el último celular porque tiene mas megapixeles, los cuales no son captados por el ojo humano, o comprar mi ipod de 80 gb cuando solo tiene a lo mucho unas cuantas rancheras, y el regetonto que con solo prender el radio se escucha.
Y a lo que quería llegar, gastar en drogas, gastar en la puta marihuana, como es posible que las personas gasten 2 dolares en un puro de marihuana, sin tomar en cuenta el hambre que hay en el mundo.
Lamentablemente no me siento en condiciones para salvar el mundo, pero por lo menos trato de aportar mi granito de arena, no fomentando la limosna o cuestiones así, sino creando conciencia de lo bueno y lo malo. (Obvio que la maldad es relativa, pero no entremos en sutilezas). Ojala algún el IMAS, el PANI o alguna otra institución vaya a crear albergues dignos, no esos llenos de pulgas donde solo comen arroz de puntilla y chayotes de la mata del patio.
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